Manual de túneles de carretera

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Autoevacuación

La autoevacuación o autorescate es la capacidad de las personas involucradas en un incidente en un túnel para alejarse de una fuente de peligro por iniciativa propia y manteniendo un comportamiento apropiado. Las experiencias respecto a anteriores incidentes de fuego en túneles nos muestran que el humo es el principal problema para la seguridad humana en caso de incendio. La oportunidad de llegar rápidamente a una zona segura libre de humos es esencial para mitigar las consecuencias del incidente. Por lo tanto, el principio de autorescate es un pilar clave de la seguridad en túneles en caso de incendio. 

El fuego en un edificio moderno normalmente dará a aquellos que estén en él una razonable oportunidad de escape hacia una zona segura cercana al área afectada por el fuego. En un túnel, las personas tienen que escapar desde la ubicación dentro del túnel hasta una de las bocas para salir del mismo. Para túneles de carretera mono tubo largos, sin salidas de emergencia a una vía de escape independiente del tubo afectado, la zona segura puede estar a varios kilómetros de distancia – lo que es una circunstancia irrazonable para salvaguardar el principio de autorescate. Por lo tanto, las normas modernas de túneles incluyen prescripciones de la distancia máxima admisible para las salidas de emergencia que conducen a una zona segura, que pueden ser una galería de evacuación, un conducto de escape, una salida al exterior o un segundo túnel paralelo. Por ejemplo, la Directiva europea sobre requisitos mínimos de seguridad, en el Anexo I define una distancia máxima admisible de 500 m y las normativas nacionales a menudo definen requisitos más estrictos.

Los incidentes graves que desafían el principio de autorescate son vehículos con incendio de rápido desarrollo que disponen materiales con una alta carga de fuego (principalmente vehículos pesados cargados de combustibles) que pueden producir mucho humo en un corto período de tiempo. Sin embargo, un incendio en un vehículo pequeño también puede convertirse en un incendio más grande si, por ejemplo, involucra a otros vehículos.

En cualquier caso, es importante evacuar temprano y rápido, por lo que, además de proporcionar una vía de escape a un lugar seguro son necesarias medidas que garanticen que las personas reaccionen rápidamente y escapen pronto a través de las salidas de emergencia.

Una mirada más cercana al proceso de autorescate revela que el comportamiento de las personas ante el mismo se puede dividir en varias fases. En primer lugar se encuentra la fase de pre-evacuación, que incluye todos los eventos previos al inicio de la evacuación y finaliza con la decisión de escapar. En la siguiente fase de la evacuación se puede distinguir entre una fase de pre-movimiento y una fase de movimiento. Durante la primera, el usuario del túnel busca información y selecciona una vía de escape y la fase de movimiento incluye todo el comportamiento que muestran los usuarios durante la evacuación hasta que alcanzan su objetivo de escapar. 

Por lo tanto, es importante potenciar esta posibilidad proporcionando información relevante y dando instrucciones claras a las personas, ya sea visual o acústicamente.

El autorescate puede estar influenciado por los parámetros del túnel y las condiciones del tráfico. Por ejemplo existe un estrecho vínculo entre las estrategias de autorescate y las de gestión de humos.

En túneles con dos tubos que funcionan con tráfico unidireccional y ventilación longitudinal, ésta admite generalmente una propagación del humo en la dirección del tráfico (la dirección inicial de propagación del humo debido al flujo de aire inducido por el tráfico). El humo va afectando gradualmente la parte vacía del tubo después del incidente y las personas que están atrapadas en el túnel previo al lugar del incidente pueden evacuar al otro tubo y en general no se ven afectadas por el humo. El segundo tubo normalmente estará cerrado al tráfico y se puede considerar una zona segura para evacuar, disponiéndose habitualmente de una conexión segura entre los tubos. En túneles unidireccionales con retenciones habituales o en túneles bidireccionales la situación es más compleja ya que es probable que los vehículos estén bloqueados en ambos lados del punto de incendio, por lo que la interacción entre el autorescate y la estrategia de ventilación se vuelve más complicada. Sin embargo, las herramientas modernas de evaluación de riesgos pueden investigar este proceso en detalle para situaciones particulares, proporcionando así una información valiosa para optimizar la interacción entre el comportamiento humano, los procedimientos y el equipamiento.

Una ruta de evacuación con mucha pendiente puede afectar a la capacidad de autorescate y al comportamiento de propagación del humo, por lo que los túneles con rasantes con mucha inclinación requieren atención especial.

La educación pública es importante para proporcionar conocimientos y habilidades a los usuarios de túneles de carretera para iniciativas de autorescate. Las campañas y la publicidad proporcionadas por los explotadores o las autoridades de los túneles de carretera pueden ayudar a los usuarios a comprender las medidas de autorescate que deben adoptar cuando se encuentran en una emergencia. En el contexto del autorescate, se deben tener en cuenta las cuestiones especiales relacionadas con las personas con movilidad reducida - consultar el informe técnico 2008R17 “Factores humanos y seguridad de los túneles de carretera desde el punto de vista de los usuarios”.

Muchos de estos temas también se abordan en la Sección I "Objetivos del control de humo y fuego" del informe 05.05.B, (francés / inglés) que incluye un estudio detallado sobre los criterios de condiciones ambientales aceptables en situaciones de incendio.
 

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